Guía de compra: qué saber antes de comprar una silla romana online La silla romana es una máquina con la que podrás trabajar la parte superior del cuerpo de forma sencilla y segura. Los aparatos cuentan con 3-4 puestos diferentes para trabajar esa zona del cuerpo. La silla romana es ideal para aumentar la fuerza, tonificar la masa muscular y mejorar la flexibilidad ya que al utilizarla se involucran muchos músculos en un movimiento uniforme. Lo primero que debes hacer es decidir qué uso vas a dar a la máquina; doméstico, semiprofesional o profesional. ¿Qué tipo de sillas romanas existen? A continuación, deberás decidir cuántos puestos quieres que tenga tu máquina ya que dependiendo de su número podrás realizar unos ejercicios u otros. (1) Para dominadas o push-ups para espalda y brazos. (2) Para fondos o dips para tríceps y hombros. (3) Para el trabajo abdominal mediante la elevación de piernas y rodillas. (4) Apoyo inferior para la musculatura pectoral. Características técnicas de las sillas romana Dimensiones Estructura Peso máximo soportado Dimensiones Las dimensiones de las sillas romanas hace referencia al espacio que ocupan, un aspecto fundamental si no dispones de suficiente espacio en casa. Por lo tanto, antes de adquirir las sillas romanas ten en cuenta este factor para poder hacer ejercicio sin ningún inconveniente. Estructura: En cuanto a la estructura de la silla romana, cuenta con una estructura robusta y con reposabrazos para tener una posición ergonómica. Además, posee un apoyo lumbar acolchado para garantizar la comodidad del usuario. Peso máximo soportado: El peso máximo soportado está directamente relacionado con la resistencia de la silla romana. Dependiendo del modelo que adquieras el peso máximo es diferente. Por tanto, asegúrate de que hay cierta diferencia entre tu peso y el peso máximo soportado por la máquina para garantizar tu seguridad durante el entrenamiento ¿Cuáles son los beneficios de las sillas romanas? Una de las mayores ventajas de las sillas romanas es su polivalencia, es decir, la posibilidad de realizar una variedad de ejercicios a través del peso de tu cuerpo con una sola máquina. Además, su estructura es muy sólida, estable y ajustable a tu complexión para poder estar cómodo en cada entrenamiento. Asimismo, la silla romana es fácil de usar, duradera y multiusuario. Otra gran ventaja es que al fortalecer la parte superior del cuerpo, entrenamos también los músculos de la espalda lo cual es beneficioso para mejorar nuestra postura y evitar dolores de espalda futuros. ¿Cómo debes cuidar y mantener las sillas romanas? En cuanto al cuidado y mantenimiento de las sillas romanas, no requieren mucha dedicación pero sí un mínimo que garantice la longevidad de la máquina. En primer lugar, es importante revisar de vez en cuando que las juntas de la máquina para comprobar que no están oxidadas y engrasarla de forma regular para que las uniones y conexiones de la máquina estén en óptimo estado. También se debe comprobar cuidadosamente que no le falta ninguna pieza a la máquina ya que esto puede afectar al entrenamiento y perjudicar al usuario a la hora de desempeñar el ejercicio. Además es indispensable limpiar la silla romana tras cada entrenamiento, con un paño húmedo y detergente no abrasivo. De esta forma, se garantizará la longevidad de la máquina y la seguridad durante cada entrenamiento.
